Reseña: Tempus fugit (Ladrones de almas)

Sinopsis:

El mundo como lo conocemos ha dejado de existir. En el futuro una temible plaga ha dejado en coma a numerosos adolescentes y la empresa Tempus Fugit se alza como la gran salvadora debido a sus cabinas de teleporte. En esta situación las vidas de tres jóvenes se cruzarán sin motivo aparente, pero con un destino común. Pablo, un muchacho de otro tiempo que sólo desea regresar a su época; Hanna, una joven sin pasado y  Kleid, un ladrón de futuros, intentarán comprender quiénes son y cuál es su misión antes de que el amor los arrastre y su tiempo se agote.

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Mi valoración personal: 

Novela de ciencia ficción digna de un guión de película, pues posee todos los ingredientes del género: las nuevas tecnologías y la ciencia más avanzada imperando en nuestras vidas, un mundo distópico y a la vez tétrico y oscuro, personajes alejados, marginados o solitarios, sin olvidar  por supuesto el tópico más frecuente: los viajes en el tiempo, en este caso, un salto incontrolado e involuntario del protagonista de la novela. Todo salido de la imaginación de un escritor novel.

Las Esencias marcan nuestros destinos como tinta sobre papel.

Tempus Fugit se erige así como una historia muy futurista, donde los humanos se quedan sin sus Esencias y los protovidentes o protovids, jóvenes androides ladrones de sus almas,  les dan un mejor uso con fines nada benévolos. Nadie hace nada por acabar con esta cruel empresa y su nefasto negocio, metáfora tal vez de que los seres humanos no tenemos tiempo de preocuparnos por nuestro futuro, una etapa de nuestra vida que ya vendrá, o simplemente no somos conscientes de lo que tenemos hasta que nos lo arrebatan. La humanidad, una completa ignorante de lo sucedido, se ve arrasada por una especie de Diluvio Universal (aquí llamada 1ª Inundación) y muestra un deseo afán de controlar el espacio-tiempo con su peculiar medio de transporte:  las cabinas de teleporte que, además, esconden un oscuro secreto. Una idea original y como ya se ha apuntado al principio, digna de un guión fílmico.

Hanna, una chica muy "moderna"

Pero a pesar de que todo esto es bueno y engancha a primera vista al lector, hay que apuntar que la novela en sí flojea en otros aspectos, como en los personajes. Si bien la chica protagonista, Hanna, es perfecta, otros no lo son tanto. Pablo, el chico del pasado que viaja por error al futuro, carece de simpatía y encanto, se echa de menos un poco más de fuerza en su personalidad. En el otro bando, el protovid Kleid, sin embargo, empatiza más, por muy antagonista y ladrón de esencias que sea. Y Hanna, la chica rara que viste medias de rayas y viaja siempre en bicicleta, se erige, quizá, como el personaje más desarrollado y a la vez más querido por parte de los lectores. Entre ella y Pablo girará la mayor parte de la historia, con Kleid a la otra, pero ¿hacía falta que se enamoraran? Porque de todos es sabido que los romances en el tiempo no cuajan. Aún así, el trio protagonista tiene algo en común: son jóvenes aturdidos y valientes. Sus vidas darán un giro inesperado.

Cuando no sabes si mañana tendrás algo para comer, 

aprendes a cazar y a guardar reservas.

(Kleid)

Y si hablamos de malos o antagonistas protagónicos, en este bando también se echa de menos más profundización en los personajes, y ese es el caso de Mr. Mapplethorne, el máximo cabecilla de Tempus Fugit; el cerebro que ideó la vil empresa.  De otros nombres como Exel, Ross y Saya, compañeros protovids de Kleid, o el científico Shawn y el profesor Gustav Mellier poco sabemos. 

El mundo distópico y futurista, Nuevomundo, es posiblemente un factor atractivo. Con ciertas pinceledas catastrofistas, Ruescas construye, para empezar, un universo timbartiano (como la portada, chulisima) casi real y de fácil recreación en la mente de los lectores. Nuevomundo es así una ciudad con altísimos edificios, siempre gris y oscura, con escasos recursos naturales y carreteras y caminos extinguidos. Y la lluvia, algo tan inocente como una llovizna, se alza en la novela como un mal mayor a la par que la propia Tempus Fugit porque ...

¿ ... y si aquel aguacero era solo el comienzo de una 2ª Inundación?

Nuevomundo, una distopía

Las nuevas tecnologías, otro aspecto a destacar,  imperan y mucho. Se empieza por las cabinas de teleporte o realidad aumentada, que facilitan las vidas a los ciudadanos de Nuevomundo, y seguimos con la comida envasada en cápsulas (algo bastante futurista), la MPO (Música Pública Online o Música Para Olvidar) y la BIO (Biblioteca Internacional Online), curioso además que este prefijo denote "vida", algo que en Tempus Fugit es muy valioso, tanto como el tiempo al que alude su título.

Dicho esto, la novela es ante todo muy original, fresca y entretenida, con final conclusivo (de agradecer porque te lo meriendas en un par de tardes), bajo una narración sencilla y amena, aunque por momentos se hace pesada. Ruescas es bastante amigo de las descripciones e introducciones; es por ello que hasta que uno no llega a mitad del libro (las primeras 100 páginas) no empieza a experimentar la intriga, algo que Tempus Fugit no consigue a grandes dosis, si bien de camino a su final  cumple con dicho cometido. La novela  tiene muchos clichés o topicazos (algunos previsibles como la chica guerrera que se revela contra el sistema), mucha amistad, venganza, terror, amor a través de las fronteras del tiempo, giros argumentales inesperados y un buen final. No está mal para su autor que pisa fuerte en el panorama literario español respaldado por una de las mejores editoriales.

Es curioso saber que entre otras historias, el autor se inspiró en Momo de Michael Ende y El Coleccionista de Relojes Extraordinarios de Laura Gallego, próximas lecturas que espero iniciar pronto, así como La Historia Interminable, también de Ende, mi libro fetiche a fecha de hoy.

EN RESUMIDAS CUENTAS:

Puntuación: 6/10 (Bien)
 

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