Una de palomitas #15: Agua para elefantes

¿De qué va?: En la época de la Gran Depresión, Jacob, un joven estudiante de veterinaria de orige polaco, decide dejar sus estudios tras la muerte de sus padres en un accidente. Tras vagabundear y subirse a un tren de polizón, Jacob empieza entonces a trabajar en el circo de los hermanos Benzini como veterinario. El joven se enamora de Marlena, una amazona que está casada con August, el dueño del circo, un hombre tan carismático como retorcido. Adaptación del aclamado best-seller homónimo escrito por Sara Gruen.

¿Quién dirige?: Francis Lawrence.

¿Cuándo?: año 2011.

¿Quiénes están?: Reese Witherspoon, Robert Pattinson, Christoph Waltz.

¿Y por qué la recomiendo?: Porque es sin más una película preciosa y entretenida, llega a emocionarte (aunque no sensibiliza, quizá solo la elefanta que da nombre a la película lo consigue), y cuando la veas creerás que la vida es el mayor espectáculo del mundo. El film, con cierto aire añejo, no solo es toda una recreación dramática y algo endeble de la vida circense en los años 30, también una visión agridulce del maltrato animal y la violencia de género. A lo largo de sus 122 minutos de metraje te sientes como un espectador más bajo la carpa de los hermanos Benzini y te encariñas al segundo uno de la elefanta Rosie (la verdadera protagonista). Los compañeros humanos del paquidermo no se quedan atrás. El guaperas de Pattinson, alejado por fin de la estela vampírica de Crepúsculo y mucho menos pálido, hace un papel más que sólido como encantador de elefantes, aunque le falta química con su partenaire, la siempre dulce Reese, quien cumple con su cometido de esposa oprimida y enamorada del galán de turno (no se podía esperar menos de ella). Completa el reparto protagónico el antagonista Christoph Waltz, agresivo y obsesivo en todo momento, cuya actuación es más que destacable. Pero sin duda la preciosa y tierna Rosie te llegará al corazón. No sería ninguna locura llegar a querer a un animal más que a una persona, ellos tienen la inocencia que a nosotros nos falta.

¿Qué destacaría además de la película? La ambientación y la fotografía, ambos muy conseguidos, que nos permiten meternos casi de lleno en lo que era la vida circense de la época. Sin más, Agua para Elefantes es un melodrama romántico convencional pero intoxicado con mucho espectáculo y calidad visual. Nos muestra que el amor verdadero, entre personas e incluso hacia los animales, puede con todo y debe romper las barreras para alcanzar la felicidad. En el circo todo es ilusión, pero cualquier parecido con nuestra realidad no es fantasía.

Título original: Water for Elephants.

Tráiler (VOSE)

La vida es el mayor espectáculo del mundo